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INUNDACIONES DE BILBAO 1983

INUNDACIONES DE BILBAO 1983

 

 

La parte más dañada de Bilbao fue el casco viejo debido a la proximidad de la ria y porque es la parte más baja de Bilbao. Se cobro  34 victimas mortales y cinco personas se dieron por desaparecidas por que no encontraron su cuerpo.

 

--CAUSAS

Las cusas generales de unas inundaciones son:

·        Exceso de precipitación.- Los temporales de lluvias son el origen principal. Cuando el terreno no puede absorber o almacenar todo el agua que cae esta resbala por la superficie y sube el nivel de los ríos. En España se registran todos los años precipitaciones superiores a 200 mm en un día

·         Fusión de las nieves.- En primavera se funden las nieves acumuladas en invierno en las zonas de alta montaña y es cuando los ríos que se alimentan de estas aguas van más crecidos. Si en esa época coinciden fuertes lluvias, lo cual no es infrecuente, se producen inundaciones.

·         Rotura de presas.- Cuando se rompe una presa toda el agua almacenada en el embalse es liberada bruscamente y se forman grandes inundaciones muy peligrosas.

·         Actividades humanas.- Los efectos de las inundaciones se ven agravados por algunas actividades humanas.

 

Pero no todas  estas influyeron en Bilbao, las dos más importantes fueron:

-Exceso de precipitación: algo que no se puede remediar, ya que en esa fecha se dio una situación de gota fría, es decir, los aires fríos del norte chocaron con los aires cálidos del sur y como ambas corrientes soplaban en sentido contrario provocaron las fuertes lluvias.

-Actividades humanas: estas acciones influyen en el comportamiento de la naturaleza y hay ocasiones en las que son contraproducentes, algunas son:

  • La impermeabilización del suelo cuando se asfalta lo que impide que el agua se absorba por la tierra.
  • Contaminación de la ría, llegan a los ríos grandes cantidades de materiales en suspensión que agravan los efectos de la inundación.
  • La ocupación de los cauces por construcciones de edificios, hacen que las aguas suben a un nivel más alto y que llega mayor cantidad de agua a los siguientes tramos del río, porque no ha podido ser embalsada por la llanura de inundación, provocando mayores desbordamientos.

 

 

Alcanzaron niveles de hasta 600 litros por metro cuadrado en un día, lo que seria una capa de 60 centímetros sobre el suelo. En ciertas zonas la altura alcanzó los tres metros de alto.

 

        --CONSECUENCIAS

 

Los daños materiales producidos fueron impresionantes; miles de personas perdieron sus hogares, sus vehículos, sus negocios y sus trabajos...uno de los lugares que quedó totalmente devastado fue el mercado de la rivera ya que está en las proximidades de la ría. Todos los productos estaban podridos, todas las cámaras estropeadas, según cuentan algunos testigos.

Entre los graves daños sufridos por la población fue la escasez de agua potable. Las cañerías y tuberías no dieron a basto y muchas de ellas reventaron dejando sin agua potable a un gran número de municipios. Hasta que los camiones cisterna llegaron a todos los rincones de los pueblos, la gente tenía que ingeniárselas para abastecerse. Las fuentes públicas se convirtieron en uno de los recursos más utilizados. La comida no supuso un problema ya que si no se habían producido daños, en las casas siempre hay comida suficiente para subsistir varios días.

Las labores de rescate por parte de profesionales, y también de ciudadanos fueron una parte esencial de los días siguientes; gracias a ellos no se produjo un mayor número de víctimas.

Además, cuando todo pasó mucha gente se presentó como voluntaria para restablecer la ciudad, limpiarla del lodo y la suciedad que se habían acumulado en las calles, traídos por el agua.

 

 

Las pérdidas materiales económicamente hablando fueron de 60.000 millones de pesetas en Bilbao, lo que supuso un aumento de los impuestos en los años posteriores para paliar los daños.

 

o   TESTIMONIOS

Los recuerdos de la gente después de casi 26 años siguen estando muy recientes.

Uno de ellos es el de una señora, madre de un niño de tres años que lo recuerda de esta manera:

"Era un día de fiesta y no tenía que trabajar, al día siguiente era el cumpleaños de mi hijo, iba a cumplir tres años. Yo estaba en mi casa, en medio del Casco Viejo. Desde el balcón veía cómo subía el agua. Daba mucho miedo. Mi marido, antes de que el nivel del agua alcanzase un metro bajó a la calle, como muchos otros vecinos, para mover el coche de sitio. Qué ilusos ¿verdad? Al final, a nuestro coche se lo llevó la ría. Por esa época trabajaba justo debajo de casa, en una tienda de ropa. La verdad es que el negocio no me preocupaba mucho. Lo que más pena me daba es que el día anterior había bajado el álbum de fotos de boda para enseñárselo a mis compañeras de trabajo y aún no lo había subido”

Hay miles de personas en Bilbao como ella que aunque no se vieron afectados personalmente también ayudaron a otras familias, bien dándoles de comer o bien cobijándoles en sus casas durante unos días. Así como los jóvenes que se alistaron como voluntarios para las tareas de limpieza. Después de todo Bilbao volvió a la normalidad.

 

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